Tras la histórica, y controvertida renuncia de Benedicto XVI, en el nublado horizonte de la iglesia católica apareció Francisco. Con acciones de características de Juan Pablo 1, y con algo del carisma de Juan Pablo II, y con poco de política Ratzinger.
Con, temor,pero con fe ( aunque se contradigan estos dos conceptos ) se espera la visita del Papa, mientras el estado monta un sistema de seguridad apoyado por una veintena de Drones, los especialistas temiendo acciones del tipo "Lobo Solitario" y Anonymous llamando a las calles.
Más de un millón de jóvenes provenientes de 170 países, en particular de América Latina, son esperados en el encuentro en Río de Janeiro.
"El Vaticano tienen gran confianza en las autoridades que deben tomar las medidas necesarias. En este momento no pensamos que se presentarán inconvenientes para las JMJ. Todos entienden que el Papa lleva un mensaje de solidaridad", aseguró Lombardi.
Para la llegada del primer Papa latinoamericano de la historia, que celebra su primer viaje al exterior, el grupo Anonymous Rio convocó una manifestación frente a la sede del gobierno de Río de Janeiro.
Por su parte, Francisco decidió no utilizar el papamóvil blindado que empleaban sus predecesores durante su permanencia en Brasil ya que desea tener un contacto directo con los jóvenes que asisten a la JMJ. "Es una decisión del Papa", contó este miércoles el portavoz del papa, padre Federico Lombardi.
El Papa utilizará, en cambio, el todoterreno blanco descubierto con el que recorre habitualmente la plaza de San Pedro durante las audiencias generales de los miércoles.
"Se trata del mismo vehículo. Es que se siente bien teniendo un contacto directo" con los jóvenes, explicó Lombardi.
Según el cargado programa papal, Francisco tendrá muchas ocasiones para darse un baño de multitudes a lo largo de su permanencia en Brasil, del 22 al 28 de julio.
El Papa contará también con otro todoterreno verde, como reserva. Los dos automóviles fueron enviados a Brasil desde Italia.
Intenso.
La agenda del Papa en Brasil fue ampliada con respecto a la elaborada por Benedicto XVI, quien renunció al papado en febrero pasado. "El programa fue adaptado, intensificado y enriquecido para ciertos eventos", adelantó Lombardi.
Tras su llegada a Brasil, el Papa descansará el martes y viajará en helicóptero el miércoles de Río de Janeiro al santuario de Aparecida, en el Estado de San Paolo, uno de los más visitados de América Latina.
"Es una visita que Francisco deseaba mucho realizar", explicó Lombardi.
El Papa visitará también una favela, se reunirá con los obispos del Consejo Episcopal Latino Americano (CELAM) e invitó a cinco jóvenes reclusos para un encuentro en el palacio episcopal.
También visitará un centro que acoge a jóvenes sin recursos, y que está especializado en recuperación de dependencia de drogas y alcohol.
Francisco saludará a todos los periodistas que viajarán con él en el vuelo papal de Alitalia, pero su portavoz advirtió que "no desea dar entrevistas ni ruedas de prensa", al contrario de sus predecesores Juan Pablo II y Benedicto XVI.
Francisco es el tercer Papa que visita Brasil. Juan Pablo II lo hizo en cuatro ocasiones y Benedicto XVI una.
Respetando su estilo sencillo y austero, Francisco evitará estar acompañado por políticos locales, cenará con sacerdotes de base y se dirigirá en sus discursos en español o portugués.
"Algunas veces también en italiano", adelantó Lombardi.
Agitación.
El grupo Anonymous Rio ha convocado a una manifestación para mañana frente a la sede del gobierno de Río de Janeiro, durante la reunión de la presidenta, Dilma Rousseff, con el papa Francisco, poco después de su llegada a Brasil.
La convocatoria realizada a través de Facebook llama a protestar frente al Palacio Guanabara "contra los gastos públicos de 180 millones de reales (unos 90 millones de dólares)" para la visita del Papa, contra el gobernador de Río, Sergio Cabral, y otros altos cargos estatales, así como "contra la violencia desmedida de la policía en las protestas" callejeras que llevaron a más de un millón de brasileños a la calle en junio y "por un estado laico".
"No se trata de religión, y sí de gastos públicos", afirma Anonymous Rio.
"Ya están mezclando las cosas, siempre apoyé todos los actos y manifestaciones, pero en este caso no concuerdo", comentó en su cuenta de Facebook el brasileño Felipe Costa, en respuesta a la convocatoria.
El costo de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) que el Papa liderará en Rio, con la participación esperada de 1,5 millones de personas, es de una suma equivalente a entre 160 a 175 millones de dólares, de los cuales unos 53 millones de gastos públicos, según la prensa brasileña.
La convocatoria a la protesta abrió polémica en las redes sociales, incluso entre católicos que estiman que la visita del Papa no tiene nada que ver con las demandas de las manifestaciones de junio por mejores servicios públicos y contra la corrupción política.
Las manifestaciones callejeras de junio llevaron a un millón a las calles, también contra los millonarios gastos públicos para construir estadios para el Mundial y no llevados a la salud y educación.
Pese a eventuales protestas, la agenda del Papa no será modificada, aseguró el Vaticano, que no teme que las manifestaciones perturben la visita del papa.
"La mayoría de los brasileños son católicos" y "juzgan natural que la comunidad se movilice" para financiar los gastos de la visita del Papa, precisó. "Cuando hay gastos es para pagar a alguien que trabajó (...) para un evento saludado positivamente por una gran mayoría de la población. Ese dinero no es derrochado", indicó.
Las manifestaciones espontáneas son consideradas por la Agencia Brasileña de Inteligencia (Abin) como la mayor amenaza durante la visita del Papa.
"El Papa llega en buena hora a Brasil, en un momento en que la población sale a las calles pidiendo justicia, igualdad, salud, educación", aspectos sociales que son lema de su papado, explicó Iván Esperanza Rocha, historiador y especialista en religiones de la Universidad estatal de San Pablo.
"La visita del Papa es mucho más delicada, pues Brasil es un país muy católico. Y las personas no consideran que esto sea lo mismo que la Copa del Mundo o las Olimpiadas", opinó Mario Campagnani (29), miembro del Comité Popular de la Copa y las Olimpiadas, uno de los principales movimientos que convocó a las protestas de junio.
Un 64,6% de la población se declara católica en Brasil, según el censo de 2010.
"Las manifestaciones tienen un carácter social y protestar por justicia, contra la corrupción y los abusos es una virtud evangélica", dijo Tanat Resende (22), estudiante de Derecho y católico, que participó de las históricas protestas que en junio reunieron a más de un millón de jóvenes en varias ciudades de Brasil. Los manifestantes pedían más dinero para reformar los sistemas de transporte, educación y salud y penas mayores para políticos y empresarios corruptos, en vez de en estadios para el Mundial de fútbol de 2014. "Es perfectamente razonable que el Papa apoye estas causas", agregó Resende.
Perfil.
El papa Francisco, quien eligió su nombre por el santo italiano San Francisco de Asís, que consagró su vida a la defensa de los pobres, ha insistido desde su elección en marzo en la necesidad de que la Iglesia, los fieles y los gobiernos presten más atención a los más desposeídos.
Su mensaje ha sido acompañado de gestos de alejamiento de los lujos, como por ejemplo la decisión de no aceptar la habitación de dos ambientes que le ofrecieron para dormir en Río, y optar por una más simple, igual a la de los siete cardenales que lo acompañan.
"El papa Francisco es un hombre muy sensible al contexto social y no me sorprendería que hubiera algún tipo de referencia" a las protestas, expresó Benjamin Paz Vermal, uno de los portavoces de la JMJ.
Oración.
Ayer, Francisco acudió a rezar a la Basílica de Santa María la Mayor de Roma para pedir a la Virgen su protección para su viaje apostólico a Brasil.
Ante la imagen de la Virgen, rezó durante más de media hora, tras lo que hizo una ofrenda de flores y encendió un cirio con el emblema simbólico de la Jornada Mundial de la Juventud católica de Río. En el momento de la visita del Papa, la basílica se encontraba abierta al público y el pontífice dirigió unas palabras a los fieles.
Aplican nueva estrategia para la seguridad
Río de Janeiro | EFE
La Policía de Río de Janeiro prepara una "nueva estrategia" para hacer frente a las protestas violentas, en especial durante las jornadas de la visita del papa Francisco, afirmó el secretario de Seguridad, José Mariano Beltrame.
El responsable de los órganos de seguridad de Río opinó que en las últimas manifestaciones han aparecido "ingredientes totalmente nuevos" que exigen un "ajuste" de las tácticas tradicionales.
"Las metodologías y planteamientos antiguos pueden no ser cien por cien eficientes", admitió Beltrame en declaraciones a periodistas después de una reunión de una comisión especial creada para investigar los actos vandálicos durante las manifestaciones.
Beltrame afirmó que desconoce si las nuevas tácticas serán "correctas" y también dijo que "no se puede dar la garantía" de que no se vayan a repetir actos vandálicos en la ciudad brasileña, como los ocurridos el pasado miércoles en el barrio adinerado de Leblon.
Entre los elementos de seguridad que desplegarán las autoridades hay dos aviones espías no tripulados (drones) para monitorear la visita del Papa y a los cientos de miles de peregrinos.
Los drones estarán concentrados el domingo 28 en la misa que oficiará el Papa en el campo de lafe, en Guaratiba, zona oeste de Río de Janeiro.
Fuente Ansa
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