Pese a todos los inconvenientes que enfrenta el vecino país, pasando por la presidente, que es en si un problema grave,por lo inviable de sus estrategias macro económicas y políticas; no obstante Buenos Aires sigue su rumbo, sigue creciendo y sigue mejorando.
Mientras, en Asunción, el centro capitalino se parece cada vez mas a un baldío, al entrar el sol es solo un muestrario de travestis y prostitutas, y cada vez mas, su aspecto es el de una ciudad donde pasó una guerra.
Pero, mientras en otros paises, progresan, aqui estamos a merced de una gran partida de inútiles con jugoso salario, que en su momento se daban el lujo de dejar sin cuorum el tratamiento de este tema, o se vagnagloriaban de sus vacaciones en el extranjero con el dinero que nosotros les pagamos.
Buenos Aires estrenó ayer un servicio de Metrobús que cambia el rostro del centro de la ciudad pero que, pese a una inversión millonaria, no garantiza mejoras en el complicado tránsito de la capital argentina.
El nuevo sistema de transporte con carriles exclusivos para colectivos (autobuses) ha cambiado la fisonomía de la emblemática avenida 9 de Julio, la más importante de la ciudad, que con 140 metros estaba considerada la más ancha del mundo hasta 2006, cuando fue desbancada por el Eje Monumental de Brasilia.
Tras meses de obras, denuncias por daños ambientales y una inversión que ha rondado los 25 millones de dólares, los 20 carriles habilitados para el tráfico de la avenida han quedado reducidos a 16, para dejar paso a las zonas exclusivas de autobuses.
En conjunto, el Metrobús cuenta con 17 estaciones salpicadas por su 3,5 kilómetros de extensión, por los que circulan vehículos de 11 líneas de ómnibus que transportan a diario a unos 200.000 pasajeros, en un recorrido muy similar al de una de las principales líneas de subterráneo (metro) de la ciudad.
Se trata de una “transformación histórica”, según el alcalde de Buenos Aires, el conservador Mauricio Macri, que aseguró que el nuevo metrobús “mejorará la calidad de vida de miles de personas”, contribuirá a despejar el tráfico en el centro de la capital y reducirá la contaminación.
En plena campaña electoral para las primarias de agosto –previa a las legislativas de octubre–, Macri tuvo que aguantar los reclamos de un grupo de trabajadores del gobierno porteño que exigían “la regularización de los contratos de trabajo y la inversión en educación y salud”.
Pese a la millonaria inversión y a los meses de obra, que han convertido en una pesadilla el tránsito por el centro, el Metrobús no garantiza la solución de los problemas del tráfico porteño.
Según cálculos oficiales, alrededor de dos millones de autos circulan cada día por la ciudad de Buenos Aires, cifra que supone un aumento del 40% en los últimos 8 años y que las autoridades atribuyen a la mejora económica y al crecimiento poblacional del cinturón de la capital. Los expertos han denunciado la falta de infraestructuras y vías rápidas, como también la insuficiencia de estacionamientos
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